• May 8th, 2024
  • Wednesday, 06:58:36 PM

‘El Racismo es un Problema de Salud Pública’


por John Marth

 

«¿Quién de aquí ha vivido con una enfermedad mental?» Craig Kramer preguntó a una audiencia de 300 personas. «¿O a quién le afecta la enfermedad mental?» Se detuvo un momento. «Ahora mira a tu alrededor.»

Todos en la sala tenían una mano levantada.

A pesar de que muchos de nosotros luchamos por mantener nuestra salud mental, muy pocos están dispuestos a hablar de ello de la manera en que lo harían con su salud física. Parece menor, pero sólo perpetúa el estigma y la vergüenza asociados con la enfermedad mental y la búsqueda de ayuda para la salud mental.

Kramer es embajador de salud mental y presidente de la Campaña Mundial para la Salud Mental en Janssen Research and Development, y formó parte de un panel reciente en la Conferencia Anual UnidosUS 2018, titulado «Mentes Saludables, Comunidades Saludables»: Hablemos de bienestar mental y emocional».

Foto: UnidosUS
De izquierda: Rita Carreón, Denisse Centeno-Lamas, Craig Kramer, Mayra Alvarez, and Dr. Leana Wen.

El objetivo del panel era tener una conversación real y honesta sobre la salud mental en los Estados Unidos, con la esperanza de romper las creencias y prejuicios de larga tiempo. Como podemos ver en las noticias todos los días, este no es el momento para el estigma. Hay consecuencias reales, devastadoras, y a veces para toda la vida, de la agitación emocional producida por el clima político actual. Y afecta a todos en el país, no sólo a los latinos.

Los últimos dos años han sido una época difícil para vivir en los Estados Unidos. La campaña de Trump y la propia presidencia se fundaron en la difusión de la retórica racista, y también vino con un aumento de los informes de intimidación y acoso basado en la raza. Todos estos factores han impactado la salud mental de millones de estadounidenses.

«Quieren que [los médicos] guarden silencio sobre la separación familiar a pesar de que causa niveles de estrés tan altos que literalmente cambia su ADN». Dr. Leana Wen
Como presidenta de Children’s Partnership, Mayra Álvarez está al tanto del pulso de los niños de Estados Unidos y ha visto la diferencia que ha marcado Trump. «Desde el comienzo de la administración Trump, la retórica anti-inmigrante ha inculcado un miedo profundo y creciente, amenazando el bienestar de los niños», dijo.

El panel discutió la combinación de cambios de política e imágenes traumáticas en la televisión que impactan la salud mental de los niños, las cuales pueden tener repercusiones a largo plazo, incluyendo enfermedades cardíacas y otras enfermedades crónicas. Si no reciben tratamiento, esto puede afectar su capacidad futura para trabajar, mantener un trabajo y, en general, vivir feliz y saludable.

Si algo bueno puede salir de la administración Trump, es que la importancia de la enfermedad mental finalmente está recibiendo la atención que no tuvo por mucho tiempo. «La ansiedad viene hacia nosotros desde todas las direcciones», dijo Álvarez. «Estamos inundados de comentarios negativos», así que sus efectos son imposibles de ignorar.

La última manifestación de Trump que daña nuestra salud mental es la separación de familias en la frontera México-Estados Unidos.

«Los niños de las familias inmigrantes están sufriendo estrés tóxico, ansiedad y otros impactos negativos de salud de larga tiempo debido a políticas injustas que separan a las familias y traumatizan a los niños», dijo Álvarez.

La Dra. Leana Wen, comisionada de salud de la ciudad de Baltimore, afirmó que el racismo es un problema de salud pública, y tenemos que resistir a quienes dicen que los profesionales de la salud no tienen cabida en la defensa de los asuntos sociales.

«Quieren que [los médicos] guarden silencio sobre la separación familiar a pesar de que causa niveles de estrés tan altos que literalmente cambia su ADN», aseguró Wen.

El trauma de estar separados de los padres puede llevar a problemas que afectan el resto de sus vidas.

«Somos los que hemos estado esperando. Debemos hacer lo que podamos ahora, incluso para poner fin a las políticas inhumanas de separación familiar y luchar por la atención sanitaria como un derecho fundamental», declaró Wen.

El estrés está afectando a todos, no sólo a las familias que están siendo separadas. Incluso si usted no está directamente afectado, o afectado por empatía, algunos estadounidenses se preguntan qué podría pasarles basándose en lo que les está pasando a otros.

«Las familias se están conteniendo de ir al parque, a la escuela, a la tienda de comestibles, porque tienen miedo de lo que sucede porque la policía de inmigración está en propiedades que no deberían estar», dijo Denisse Centeno-Lamas, directora ejecutiva de Hispanic Family Counseling.

La moderadora del panel, la Vicepresidenta Adjunta de Salud de UnidosUS, Rita Carreón, señaló lo perjudicial que puede ser separar a las familias en tiempos difíciles. «Los padres pueden ser la fuerza más poderosa para prevenir o revertir el impacto del estrés tóxico en los niños», por lo que separar a los niños de sus padres los separa efectivamente de una de sus pocas fuentes de aliviar el trauma.

A pesar de los duros desafíos a los que nos enfrentamos, los jóvenes Latinx muestran una gran resistencia frente a las dificultades. Entonces, ¿qué podemos hacer para que la salud mental sea más comúnmente aceptada?

«Damos prioridad a la salud física», dijo Wen. «Necesitamos priorizar conscientemente la salud mental de igual manera.»

Centeno-Lamas quiere que la salud mental sea considerada tan seriamente como cualquier problema físico, y no como un símbolo de debilidad. «La mejor manera de eliminar el estigma es hablar de ello», dijo. «Contar nuestras historias, para que no parezca que les pasa a otras personas, sino a nuestras familias y a nuestras propias vidas.»

 

John Marth es un Especialista Senior de Contenido en UnidosUS.

 

Traducción por Juan Carlos Uribe-The Weekly Issue/El Semanario