Por Sara Wilson
Iryna Rothko llegó a Colorado hace aproximadamente dos semanas tras huir de Kiev con sus dos hijos para escapar de la violencia de la guerra de Rusia contra Ucrania.
Su marido se quedó atrás y buscó seguridad mientras los militares rusos bombardeaban el barrio que ella dejó en el campo, a las afueras de la capital. Rothko observó en tiempo real desde Colorado, a través de una cámara doméstica, cómo aquella idílica casa con piscina y parque infantil se convertía en otro lugar de destrucción de la guerra.
«Al principio, lo negaba todo», dijo Rothko, a través de un intérprete, durante una reunión con la representante demócrata Diana DeGette el martes por la mañana en Denver. Pero cuando la amenaza de guerra se convirtió en una preocupación real por la seguridad, el marido de Rothko insistió en que ella y los niños abandonaran el país. Ella aterrizó en Colorado, donde vive su hermana.
«La gente cuyas casas son bombardeadas todos los días no puede esperar dos años para poder venir aquí, y lo sabemos».
Congresista Diana DeGette
Rothko es una de los más de 3 millones de personas que han abandonado Ucrania desde la invasión rusa del 24 de febrero. Las Naciones Unidas estiman ahora que 10 millones de personas han sido desplazadas de sus hogares.
«Sobre todo, queremos darles la bienvenida a estar en Estados Unidos y hacerles saber que toda la comunidad y todo el país les apoyan y les envían cariño», dijo DeGette.
Katerina Khmil, que también se reunió con DeGette, habló de su casa, situada junto a un aeropuerto militar en Poltava (Ucrania), que se salvó por poco de la primera oleada de ataques. Ella y su hija, Tetiana Khmil, tardaron dos semanas en tomar la decisión de abandonar su casa y venir a Colorado. Viktor Khmil, hijo de Katerina y hermano de Tetiana, vive en Denver. Llegaron hace aproximadamente una semana tras cinco días de viaje.
El marido de Tetiana y sus dos hijos adultos permanecen en Ucrania. Trabajan en la reparación de las infraestructuras eléctricas críticas que son golpeadas y son voluntarios en el grupo de defensa territorial de su ciudad. La familia puede hablar a diario, ya que el Wi-Fi sigue funcionando.
«Tetiana dice que aunque están aquí en un lugar cálido y seguro, no se sienten seguros porque el país está en guerra», dijo la intérprete Marina Dubrova, de Ukrainians of Colorado.
DeGette dijo que la mayoría de los refugiados que han llegado a Estados Unidos hasta ahora ya tienen familia en el país o han utilizado visados de turista.
El Congreso reautorizó el 15 de marzo la Enmienda Lautenberg, que proporciona una vía para que los grupos religiosos perseguidos de la antigua Unión Soviética se reúnan con sus familias en Estados Unidos. Otros mecanismos de reasentamiento que requieren una remisión de las Naciones Unidas o de la Embajada de Estados Unidos pueden tardar hasta dos años.
«Las personas cuyas casas son bombardeadas todos los días no pueden esperar dos años para poder venir aquí, y lo sabemos», dijo DeGette.
DeGette espera que la acción bipartidista del Congreso en las próximas semanas pueda ayudar a otros refugiados ucranianos a venir al país en un proceso acelerado a través de ese programa de reasentamiento de refugiados.
Eso podría significar más llegadas a Colorado.
«Esperamos que, a medida que Rusia continúe con los abusos humanitarios, podamos ver aún más. A medida que las nuevas políticas de reasentamiento de refugiados entren en vigor, más personas llegarán a Denver y a Colorado», dijo DeGette.
El Comité Internacional de Rescate es una de las tres agencias de reasentamiento de refugiados que opera en Colorado.
«Las agencias de reasentamiento de refugiados aquí en Colorado están preparadas para ayudar a los refugiados que vienen de Ucrania», dijo la directora ejecutiva del IRC, Jennifer Wilson. «Reconocemos que la mayoría de las personas desplazadas sólo quieren volver a casa, y es la mejor y más preferible opción si podemos restaurar la seguridad en el país para que la gente pueda regresar».
Dubrova dijo que las personas que deseen ayudar a apoyar a los ucranianos pueden hacer donaciones a los ucranianos de Colorado mientras la organización recauda dinero para transportar suministros médicos.
Sara Wilson es reportera de Colorado Newsline. Este artículo es republicado de Colorado Newsline bajo una licencia Creative Commons.
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