‘No Vamos a Rendirnos’

United We Dream y sus aliados movilizaron protestas esta semana con respecto a los esfuerzos del presidente Trump para poner fin a la Ley de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, que permite a los inmigrantes indocumentados que fueron traídos a los EE. UU. como menores de edad solicitar permisos de trabajo y los protege de la deportación.

Después de que Político reportó el domingo por la noche que el presidente anunciaría un retraso de seis meses antes de que vaya a terminar con las protecciones de DACA para casi 800,000 personas, el senador Bernie Sanders (I-Vt.) estuvo entre muchos críticos de Trump que expresaron su indignación por el plan del presidente.

«Son Americanos. Este es su hogar. Aquí es donde fueron a la escuela. Aquí es donde tienen a sus familias, a sus padres, a su todo.»
Angelica Salas

El senador Sanders dijo que la decisión del presidente es «una de las decisiones más horribles y crueles que jamás haya tomado un presidente en nuestra historia moderna». Quitar las protecciones legales a 800.000 jóvenes criados en este país es absolutamente contrario a lo que representamos como nación».

«El Congreso debe actuar de inmediato para restaurarlo», declaró Sanders.

«No nos vamos a rendir», dijo Angelica Salas, directora ejecutiva de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Ángeles, en una reunión reciente. Refiriéndose a los Soñadores, ella dijo: «Son Americanos. Este es su hogar. Aquí es donde fueron a la escuela. Aquí es donde tienen a sus familias, a sus padres, a su todo.»

United We Dream, la organización de jóvenes inmigrantes más grande del país. A las organizaciones se unieron otros grupos de derechos de los inmigrantes que denunciaron la terminación de DACA por parte de Trump.

Kristen Clarke, del Comité de Abogados por los Derechos Civiles Bajo la Ley, señaló que la animosidad de Trump hacia los beneficiarios del DACA lo alinea aún más con el movimiento xenófobo nacionalista blanco que él se ha negado a denunciar claramente en las últimas semanas, después de la manifestación supremacista blanca de Charlottesville.

«Invertir el programa de Acción Diferida para la Llegada de Niños y Niñas hace que las personas indocumentadas sean blanco de empleadores sin escrúpulos, robo de salarios y otros abusos en el lugar de trabajo, y debilita el bienestar económico de sus familias, incluyendo a sus esposos, hermanos y descendientes ciudadanos», dijo Clarke. «También es un ejemplo cruel de cómo el actual avance de la administración en políticas que promueven el perfil racial y étnico y la xenofobia han envalentonado aún más a los nacionalistas blancos, que tienen una historia de contribuir a un clima de temor y odio.

El retraso de seis meses esperado antes de que la terminación entre en vigor le daría al Congreso una oportunidad para actuar, pero los defensores de los derechos de los inmigrantes temen que el anuncio de Trump se suponga que en realidad ofrecerá DACA como una moneda de cambio al Congreso mientras el presidente trata de obtener fondos y apoyo para otros aspectos controvertidos de su agenda migratoria, incluyendo el muro fronterizo.

Julia Conley es redactora de Commondreams.org.

Traducción por Juan Carlos Uribe.