La gente hace muchas suposiciones sobre la forma en que la comunidad Latinx se siente sobre el aborto. Este es un tema complejo y complicado, pero la conclusión es que las latinas creen que si alguien necesita buscar un aborto, este debe ser tratarlo con compasión y debe ser apoyado. Esto es una verdad en todas las religiones.
Las preguntas acerca del embarazo y la crianza son verdaderamente personales. Cada persona debería poder decidir si elige la adopción, busca el aborto o se convierte en padre. En base a lo que nuestra tradición de fe nos enseñó, nuestras circunstancias financieras y de salud individuales, nuestras relaciones y si estamos o no listos para ser padres. Estas consideraciones son importantes. Estas es el tipo de decisiones se toman con el apoyo de personas de confianza en nuestra vida. Y hablando con profesionales de salud.
Podemos contactar a un amigo o sentarnos con nuestro líder de fe y pensar que opción respeta nuestras circunstancias únicas y lo que creemos que es mejor para nosotros. Usted sabe quién no es y los legisladores no deben inmiscuirse en esta decisión. Pero eso es lo que sucede una y otra vez. Los políticos que no quieren que el aborto esté disponible, quieren quitarle el derecho a tomar una decisión propia a las mujeres, impulsando leyes y políticas que socaven o incluso eliminen el acceso. A menudo lo hacen de maneras muy insidiosas poniendo sus creencias y su agenda personal antes que nuestras necesidades.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) acaba de emitir su plan estratégico de cinco años. Este incluye una definición de la vida como «comenzando con la concepción». Hemos visto esto antes en Colorado. La idea de «ser persona» ha estado en las urnas tres veces por separado y cada vez que los votantes en nuestro estado han rechazado la idea.
Los activistas que se oponían a Personhood, Colorado se opuso al ataque contra la atención de la salud reproductiva, que empeoraba el acceso a la anticoncepción de emergencia, el aborto y algunos tratamientos de fertilidad. También temían que la definición ampliada se pudiera utilizar para criminalizar el comportamiento de las mujeres embarazadas o castigar a las personas según los resultados del embarazo. Este ataque lo hemos visto cada vez con mayor frecuencia en los últimos años, por ejemplo, cuando se redactan leyes para que una mujer que tenga un aborto involuntario corra peligro de ser arrestada o interrogada.
Un número alarmante de mujeres están siendo arrestadas, enjuiciadas y encarceladas solo por perder su embarazo. National Advocates for Pregnant Women ha identificado más de 375 arrestos desde 2005. La legislación acerca de persohood forma parte de una agenda de negación de decisiones personales y criminalización de mujeres y proveedores, estos ataques afectan mas a mujeres de bajos ingresos y a mujeres de color.
A Gina, una organizadora comunitaria de COLOR, sus médicos le dijeron que su embarazo era de alto riesgo. Después de eso, ella trabajó duro para tomar todas las precauciones necesarias, pero se encontró sangrando una noche. Cuando fue a la sala de emergencias, el médico le dijo a Gina y a su esposo que la placenta se había desprendido y que había perdido el embarazo. Más tarde dijo que a pesar del daño físico, el mayor dolor fue «disculparse con mi hija, que tenía seis años en ese momento, y decirle que no iba a tener un hermano o una hermana».
Muchas mujeres están extremadamente tristes cuando experimentan la pérdida del embarazo, especialmente cuando estas experiencias se complican aun más debido a las barreras a la atención o por las leyes que estigmatizan el aborto espontáneo. Gina luchó duramente contra personhood sabiendo que ella había estado en los zapatos de las mujeres que podrían enfrentar un aborto involuntario y luego tener que soportar el interrogatorio o la investigación.
Las mujeres que han enfrentado una complicación o pérdida del embarazo no son de interés público. Impulsar los tratamientos de fertilidad, la anticoncepción y el aborto fuera de nuestro alcance no nos ayuda a satisfacer las necesidades de las mujeres y las familias de nuestro estado. En pocas palabras, esta política no solo desmejoraría los esfuerzos actuales para garantizar y ampliar el acceso a la atención medica, sino que realmente causaría un daño real. HHS está aceptando comentarios públicos. Esperamos que los residentes de Colorado hagan que nuestras voces se escuchen sobre este tema como lo hemos hecho antes.
Karla G. Gonzales García es la Directora de Políticas y Programas de la Organización de Colorado para la Oportunidad de las Latinas y los Derechos Reproductivos (COLOR). Colorlatina.org.
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