¿Cómo Será el Orden Social en 2018?

¿Cómo queremos que sea el orden social de 2018 y el resto del siglo XXI? Con los muchos desafíos internos y externos que la mayoría de los estadounidenses enfrentan en la sociedad, el día del juicio final parece estar a la vuelta de la esquina. Los incendios provocados por los disturbios se han visto continuamente avivados por la aparición del Klu Klux Klan en un mitin de la Universidad de Virginia. Armados con armas y listos para enredarse en las calles con los manifestantes que habían venido a practicar la democracia en acción, los hombres del KKK mostraron sus verdaderos colores viciosamente golpeando a los manifestantes con una variedad de armas. Los sueños del Klan de crear otra Confederación parecen ser impulsados por el presidente Donald Trump. Cuando se le pidió que hablara con el público estadounidense sobre este asunto, el presidente siguió echando la culpa a ambos bandos por el fiasco. Los estadounidenses de mentalidad progresista pensaban que este tipo de intolerancia se había vuelto impermeable a la conciencia norteamericana; parece que sólo se ocultaba clandestinamente en la conciencia colectiva de la derecha, esperando un catalizador. Cuando el líder del mundo libre participa en conductas racistas, indiscriminadamente da permiso para que otros racistas muestren abiertamente sus prejuicios. Caímos presa de la derecha radical, cuya estrechez de miras creímos que había sido usurpada. ¡No es el caso! Están trabajando codo a codo con el líder de este país para llamar a otros grupos que no encajan en el modelo estadounidense y cuyos derechos humanos y civiles también se han vuelto impermeables a una forma de gobierno totalitario.

Los estudiantes de DACA siguen viviendo con una ansiedad y estrés indebidos, incapaces de disfrutar de cualquier tipo de libertad. Belén Sisa, una estudiante universitaria de DACA que estudia ciencias políticas, podría estar todavía sentada en una cárcel de Washington D. C. cuando esta columna sale a la calle después de participar en una acción organizada por el Proyecto Semilla. Percibida como una disidente, ella y cientos de miles de niños inocentes pueden ser deportados. Belén puede convertirse en la heroína de esta debacle o en una víctima de la Administración Trump, donde los corredores del poder carecen de empatía.

Los soldados transexuales y homosexuales, aunque han ganado victorias judiciales en los tribunales, seguirán enfrentándose a la actitud homofóbica que se ha generalizado en el ejército. La derecha cristiana continúa aferrándose a su método de religión, condenando a cualquiera que no canta a su tono. Los países inmigrantes de Oriente Medio también están siendo confrontados por el gusto de las «creencias» cuando son atacados por los mismos expertos derechistas que predican la democracia, pero presionan para que se prohíba a cualquiera cruzar las fronteras legalmente. Los americanos no deben dejarse engañar por el lobo vestido de oveja. Trump y compañía son expertos en desvíos, que intentan utilizar un renacimiento de las Guerras Culturales para evitar tener que responder a lo que parece ser Trumpgate en la creación, mientras se aprueba una ley de impuestos que es pálida en comparación con la economía vudú practicada por el anterior presidente Ronald Reagan.

El presidente Trump, con toda su grandiosidad, puede estar llevando al país hacia una sociedad socialista democrática más rápido que su amigo enemigo Bernie Sanders. Las ganancias que las grandes corporaciones le devolverán a sus’ obreros’ son escasas comparadas con lo que los ricos continuarán llenando sus bolsillos.

No se puede oprimir a la gente sin enfrentarse a la resistencia.

Los estadounidenses, cuya conciencia no ha sido burlada por la política del momento, seguirán prevaleciendo mientras la verdad de la justicia siga en ebullición mientras la actual administración no ha logrado proporcionar el liderazgo necesario para dirigir un país libre. No se puede arrebatar la dignidad de las personas sin tener que responder a la ira de las masas, una vez que han llegado al fondo del barril sin ningún otro lugar adonde ir, excepto hacia adelante.

¡Feliz Año Nuevo!

Dr. Ramón Del Castillo es periodista independiente. 12-25-2017 Ramón Del Castillo.

Traducción por Juan Carlos Uribe

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