El Programa El Puente Guía a los Estudiantes en el Proceso de Investigación

Por Mary Beth King

Los estudiantes no llegan a la Universidad de Nuevo México (UNM) con el conocimiento innato de cómo realizar una investigación. La idea de elegir un tema y llevarlo a cabo puede ser desalentadora y algunos estudiantes están dispuestos a abandonar antes de intentarlo.

Como señaló un estudiante en una presentación reciente, «…Durante años, estuve convencido de que no sería capaz de hacer investigación si no estaba preparado para hacer cosas como cortar cerebros de rata o meterse con placas de Petri… Pensé que simplemente no tenía mentalidad de investigador».

Photo: UNM
El Puente’s program director, Alejandro Mendiaz-Rivera.

La beca de investigación El Puente de la UNM, un programa dependiente de El Centro de la Raza, apoya y promueve a los estudiantes en múltiples áreas académicas, ofreciéndoles la oportunidad de aumentar su comprensión y experiencia de la investigación académica, y obtener el conocimiento y las herramientas necesarias para comenzar el proceso de investigación, desarrollar una propuesta de investigación y prepararse para la escuela de posgrado y el mundo profesional.

El proceso de solicitud para El Puente ya está en marcha. El proceso de solicitud tiene como fecha límite el 31 de mayo.

La Beca de Investigación El Puente comenzó como una pasantía de servicio a principios de la década de 2000, pero evolucionó en 2014 para convertirse en el programa centrado en la investigación de pregrado que es hoy, explicó el director del programa Alejandro Mendiaz-Rivera. Él es un ex alumno del programa cuando era una pasantía basada en el servicio. Su propia experiencia en este programa le llevó a cursar una doble licenciatura en Estudios Latinoamericanos y Español durante su carrera universitaria y a convertirse en un profesional de Asuntos Estudiantiles centrado en el avance de las oportunidades educativas para los estudiantes minoritarios.

«Recibimos comentarios de nuestros estudiantes que luchaban por ser admitidos en programas de investigación como el McNair o que encontraban desafíos al solicitar una escuela de posgrado, ya sea aquí en la UNM o en otro lugar… Enseñamos los fundamentos de la investigación académica y la solicitud de ingreso a las escuelas de posgrado y profesionales porque estamos tratando de tender un puente a los estudiantes para que tengan oportunidades de continuar y para que ingresen a las escuelas de posgrado y profesionales», explicó Mendiaz-Rivera, señalando que El Puente significa «El Puente».

Para participar en el programa, los estudiantes deben pertenecer a un grupo étnico subrepresentado en la educación superior, ser un estudiante universitario de primera generación o calificar como de bajos ingresos.

«Debido a la demografía de la universidad y al hecho de que estamos alojados en El Centro de la Raza, la mayoría de los solicitantes se identifican como hispanos o latinos, pero también trabajo con estudiantes que no se identifican de esa manera», dijo Mendiaz-Rivera, y añadió: «El Puente fomenta una comunidad intelectual única basada en la incubación de la brillantez de los estudiantes de la Raza e históricamente subrepresentados.»

El Puente se financia con las cuotas de los estudiantes en lugar de con subvenciones, por lo que no está sujeto a algunas de las restricciones impuestas a programas similares. El programa está limitado a unos 20 estudiantes universitarios, pero debido al aumento de la financiación para el próximo curso escolar tendrá cabida para 24. Los estudiantes de El Puente se reparten entre una variedad de disciplinas y no se limitan a un determinado subconjunto de carreras como la mayoría de los programas de investigación.

«Puedo trabajar con cualquier carrera, siempre y cuando estén interesados en investigar y aprender sobre las escuelas de posgrado y profesionales», dijo Mendiaz-Rivera.

«Creo que los estudiantes tienen miedo de aplicar porque no tienen experiencia en investigación, pero ese es el punto de El Puente. Es un puente”.
Alejandro Mendiaz-Rivera, El Centro de la Raza

Uno de los estudiantes, que investigó cómo Nuevo México puede aumentar el ritmo de desarrollo de las energías renovables, forma parte del Comité Asesor Juvenil del PNM.

Mendiaz-Rivera señaló a tres ex alumnos de El Puente que recientemente han sido destacados por sus logros.

Biraj Silwal ganó el primer lugar y 5.000 dólares esta primavera en el Concurso de Aplicaciones Móviles 2022 de la UNM y el CNM después de trabajar con el Proyecto de Investigación de Inseguridad de Necesidades Básicas de la UNM para desarrollar la aplicación LoboEats. La aplicación permite a las oficinas del campus principal de la UNM publicar su disponibilidad de alimentos y los estudiantes con la aplicación serán notificados en tiempo real. Pasó casi 330 horas escribiendo el código informático de la aplicación.

Eric Olaguir ha sido aceptado en el competitivo programa Apple Scholars. Los estudiantes de todo Estados Unidos fueron seleccionados al compartir sus puntos de vista sobre el futuro de la industria tecnológica y cómo se perciben contribuyendo al avance de la tecnología en áreas de accesibilidad, educación, medio ambiente, inclusión y diversidad o privacidad. Recibió una beca de 15.000 dólares, se le asignó un mentor de Apple para el año y participó en un evento exclusivo de inmersión de una semana con Apple.

Raven Otero Symphony es la primera nueva mexicana en ser seleccionada para la clase de becas Brooke Owens, un programa sin ánimo de lucro aclamado a nivel nacional que reconoce a mujeres universitarias destacadas y a otras minorías de género con multitud de oportunidades de prácticas y tutoría, incluso en el campo aeroespacial. Otero-Symphony es una estudiante de último año que estudia estadística, y es una de las 51 estudiantes elegidas entre más de 1.000 solicitudes de todo el mundo.

El ex becario (2020-2021) Noah Lucero completó su licenciatura en Bioquímica con una designación del Honors College. Comenzará a cursar su doctorado en la Facultad de Medicina de la UNM a partir de julio. Su tema de investigación fue «Actitudes y perspectivas hacia la detección de la Malformación Cavernosa Cerebral», una condición causada por una mutación genética hispana común que afecta desproporcionadamente a los nuevos mexicanos.

«El Puente me ayudó a entender que la investigación no es tan ambigua como a menudo se hace ver», dijo Lucero. «El programa me ayudó a darme cuenta de que cualquiera puede hacer investigación y que la contribución de todos a nuestro conjunto de conocimientos sobre un tema es significativa. El programa me apoyó en todo momento para entender lo que es la investigación, hasta identificar un mentor de la facultad y proporcionarme los recursos formales para llevar a cabo la investigación en una institución como la UNM.»

Mendiaz-Rivera enfatizó que no se requiere que los estudiantes tengan experiencia en investigación.

«Creo que los estudiantes tienen miedo de aplicar porque no tienen experiencia en investigación, pero ese es el punto de El Puente. Es un puente. Se supone que debemos llevarlos desde esa fase introductoria hasta un punto en el que se sientan muy cómodos con sus habilidades como investigadores y académicos para luego solicitar otros programas o escuelas de posgrado o profesionales», dijo.

Por eso se dirige a estudiantes de segundo y tercer año: «No busco estudiantes que ya hayan desarrollado y llevado a cabo todo un proyecto de investigación».

Y al final del programa, no todos los estudiantes deciden dedicarse a la investigación.

«No pasa nada. Queremos un espacio para que los estudiantes exploren sus habilidades y capacidades. ¿Queremos que sigan investigando? Por supuesto, y la mayoría acaba haciéndolo. Pero no hay presión como en otros programas».

Las solicitudes para el próximo año que comienza en otoño se están tomando ahora y la fecha límite de solicitud es el 31 de mayo de 2022. Mendiaz-Rivera insta a los estudiantes interesados a presentar su solicitud.

El programa incluye un premio de 2.000 dólares para completar los requisitos de la beca que se dividirá entre los semestres de otoño y primavera. Los estudiantes deben estar inscritos en la UNM para el otoño de 2022 y la primavera de 2023 y ser capaces de comprometerse durante todo el año académico. Se prefiere un GPA de 3.0 o superior. Los estudiantes deben cumplir uno de los tres criterios siguientes:

-Miembro de un grupo étnico subrepresentado en la educación superior

-Primera generación de estudiantes universitarios

-Calificar como de bajos ingresos

El programa está abierto a cualquier estudiante sin importar su estatus migratorio.

«Como director, lo más satisfactorio de trabajar con los becarios de El Puente es ver que su confianza crece exponencialmente. Muchos estudiantes de primera generación, de minorías y de hogares de bajos ingresos llegan a la UNM con el síndrome del impostor, sintiendo que no pertenecen aquí ̶ ‘la UNM no es el espacio para nosotros, no podemos ser académicos de primera categoría’ ̶ y al final del programa, todos mis estudiantes salen sabiendo que son los mejores académicos del campus y que están contribuyendo a sus campos, y que son absolutamente brillantes y que el aumento de la confianza en sus propias habilidades es increíble. No creo que eso se pueda enseñar directamente. Es algo que tienen que descubrir por sí mismos».

Mary Beth King es especialista en relaciones públicas de la Universidad de Nuevo México.

Traducido por Juan Carlos Uribe-The Weekly Issue/El Semanario.

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